Pablo Pinotti construyó su carrera política asumiendo distintas responsabilidades, desde cargos en el Ejecutivo, el Concejo municipal, organismos del gobierno provincial y su actual periplo por la Legislatura santafesina.
Su confirmación como candidato a la intendencia aparece como el resultado lógico de ese devenir. “Es la consecuencia de un proceso que se fue dando durante muchos años”, afirma. Pero sostiene que la decisión tiene fundamentos en el apoyo y la seguridad que le brindan los que tiene a su lado: “Me gusta que el grupo me interpele. No creo en los obsecuentes. Y sobre todo destaco el vínculo que tenemos con gente, que es muy bueno y sano”.
Pinotti tendrá como ladera a la actual concejala, Andrea Ochat, iniciada en la función pública justo cuando el actual diputado iniciaba, no sin polémica, su camino por la política provincial. Ochat, con un perfil y estilo bien definido, hace pie en el contacto con los vecinos y una rigurosa función de contralor. “La transparencia hace que el vecino renueve la confianza con la gestión municipal. Hoy eso está perdido”, sentencia reclamando por la falta de información y decisiones a espaldas del Concejo y la comunidad.
“Soy consciente de que lo que ahora reclamamos lo vamos a tener que cumplir si nos toca gobernar. Pero lo cierto es que nunca pensé que íbamos a llegar a tener tantos niveles de desprolijidad en la administración local”, critica la concejala.
“El eje básico de la gestión tiene que pasar por la calidad del servicio público. Eso es lo primordial. Y luego vendrán otros fundamentales, como inclusión social, seguridad y la relación permanente con la comunidad”, aventura Pinotti en rol ejecutivo. Y se compromete a gobernar de frente a la sociedad y transparentar los gastos del municipio. “Debe ser un ejercicio automático”, promete.
Sobre su posicionamiento político, más allá de competir con un partido distrital, Pinotti no duda: “Nosotros formamos parte de Unidos, tenemos vínculos y trayectoria de trabajo con los principales dirigentes. Si Unidos gana, tenemos llegada. Pero vamos a gestionar con la gente y aprovechando a los referentes locales que tienen llegada directa a los principales niveles del Estado. Ellos nos pueden ayudar en las gestiones. Hay que potenciar a los actores de la sociedad civil”, remata.
